El implante dental es un producto sanitario que se inserta en el hueso de la mandíbula o del maxilar mediante una leve intervención quirúrgica con el objetivo de reemplazar un diente perdido. Están fabricados a base de titanio biocompatible, material que evita cualquier reacción de rechazo del cuerpo y asegura su unión al hueso.
Los implantes dentales poseen una forma cilíndrica roscada, con una longitud y diámetro seleccionado en función de la cantidad y calidad de hueso. Estos cumplen el papel de raíz artificial a la que se atornilla un pilar y la corona protésica que restaura la apariencia final de un diente natural.
Para planificar la intervención, el odontólogo necesita realizar unas pruebas de imagen (radiografía panorámica y tomografía computarizada-CBCT-) que permiten estudiar el caso de forma individual, valorando la cantidad y calidad de hueso para adecuar la longitud, grosor y dirección del implante dental ideal para cada caso concreto.
El procedimiento es totalmente indoloro y se realiza bajo anestesia local, aunque existe la opción de sedación consciente si el paciente lo desea para hacer la experiencia lo mas cómoda posible. Constituye un trabajo sencillo y dura poco tiempo, si bien para tener los dientes fijos se debe esperar entre unos días y 6 meses dependiendo del protocolo escogido.
El procedimiento de carga inmediata cuenta con las siguientes ventajas: se simplifica el acto quirúrgico a una sola fase evitando una segunda cita de colocación del pilar, el paciente porta de forma inmediata un diente provisional haciendo vida relativamente normal y se reducen los tiempos de espera necesarios para la colocación de la corona dental definitiva. Esta modalidad requiere de una cantidad y calidad de hueso adecuada.
Esta modalidad de implante dental consta de dos fases. En una primera cita se introduce el implante que debe osteointegrar en el hueso. Para ello debe pasar un periodo desde la colocación de 3-4 meses en mandibula y de 5-6 meses para el maxilar superior. En la segunda cita se realiza una pequeña incisión que descubre el tornillo para colocar un pilar sobre el que finalmente irá atornillada la corona dental definitiva confeccionada sobre medidas individualizadas.
En los casos en los que se cuenta con una cantidad y/o calidad de hueso deficiente se realizan pequeñas intervenciones asociadas/accesorias que aseguran un buen entorno para la colocación del implante. En una intervención previa se coloca hueso artificial o del propio paciente para aumentar el espesor de hueso disponible (regeneración guiada o elevación de seno). Una vez completado ese paso se sigue el protocolo habitual de colocación aunque existen casos en los que se puede realizar de forma simultánea a la colocación del implante.
La prótesis dental sobre implantes se compone de coronas individuales, puentes o arcadas completas que se conectan sobre los implantes osteointegrados para reemplazar las zonas afectadas por la pérdida de uno o mas dientes. Según las necesidades del paciente existen diferentes tipos: